En Muxía, Costa da morte gallega, los percebeiros se juegan la vida día a día en acantilados e islotes, buscando el preciado marisco con el que sobrevivir. En Navidad es donde alcanzan la mitad de sus ingresos anuales, teniendo que enfrentarse a un mar tremendamente peligroso.
Trece años después de la tragedia del Prestige, el film retrata un trabajo de personas que viven al límite, tanto económico, como vital. Un reflejo actual de la relación entre el hombre y el mar, el hombre y su entorno.