La tranquilidad de un pequeño y aislado pueblo de montaña se ve alterada por la llegada del nuevo alcalde Luís Ugarte, que relevará de sus funciones al dominante sacerdote del pueblo padre Julián. El hecho coincide con el miedo de los habitantes del pueblo por el supuesto regreso de una antigua maldición que pone en peligro sus vidas.
Luís Ugarte, incrédulo ante las creencias del padre Julián y sus fieles, junto con el monaguillo Tomás averiguarán la verdad de esta ancestral maldición, aunque ambos pagarán un precio demasiado alto por ello.